Todos conocemos el poder curativo del agua. Este elemento primordial de la naturaleza, que se nos brinda a través de manantiales, fuentes termales, ríos o el mar, nos otorga propiedades de limpieza energética y purificación corporal.
Sin embargo, tal vez sea más complejo comprender qué sucede cuando es el agua que tomamos la que nos cura energéticamente. Esto es el Agua Diamantina. Pero, ¿qué es, un invento del hombre? La realidad es que sí. Luego de años de investigación, un francés llamado Joel Ducatillon, descubrió gracias a un aparato codificador que él mismo inventó, que el agua poseía una serie de elementos biológicos (vitaminas, hormonas, metales, minerales, etc.) que se modificaban de acuerdo a determinados estímulos que le provocaba al agua. Así, el perfeccionó un aparato tecnológico que estimulaba las partículas del agua con sonidos u ondas vibracionales y lograba que el agua sea altamente sanadora.
Como resultado obtuvo un “agua inteligente”, capaz de captar las intenciones que tienen las personas al hacer sus pedidos verbales. Lo sorprendente es que el agua diamantina logra transformar y elevar, por un proceso biológico, la energía positiva dentro del cuerpo de quien la bebe. Con el tiempo de la experimentación, se ha comprobado que la frecuencia de vibración del agua diamantina es más alta y, gracias a ella, se producen internamente energías que resuelven algunos conflictos humanos.
¿Cómo funciona?
Se realiza un pedido verbal determinado que se grabará en el agua y será enviado, al beberla, directamente al ADN. Así, bajo la forma de un mensaje codificado, ésta irá cambiando progresivamente la memoria celular del sujeto para mejorar el funcionamiento de su organismo.
Dónde se consigue
Para obtenerla, hay que realizar una búsqueda de personas que amablemente la obsequien. No es un producto que se venda, sino que se regala entre las personas que la consumen y creen en su poder. Bajo estas instancias, es de suma importancia que tome la precaución de guardar cierta cantidad de Agua Diamantina para reproducirla permanentemente. Como es un elemento de sanación contiene una alta energía sagrada y por ende, se la debe tratar y difundir de mano e mano de la misma manera.
Sanar con Agua Diamantina
Por la mañana comience sentándose en un lugar cómodo y realice ejercicios de meditación; luego inicie el ritual de autosanación con el Agua Diamantina. Beba un sorbo y aplíquela en las zonas de su cuerpo afectadas, que usted desee que sean sanadas. Diga: “Estoy sano en nombre de la Luz”. Mientras repite este decreto concentre su atención en el entrecejo, lugar donde las energías espirituales están agrupadas. Respire y relájese por completo. Si durante el día siente molestias o dolor puede efectuar esta práctica las veces que lo desee.
LA EXPERIMENTACIÓN DE MASARU EMOTO
Algo similar es lo que hizo Masaru Emoto, un investigador Japonés quien experimentó fotografiando microscópicamente moléculas de agua congeladas a -25ºC, provenientes de distintas fuentes luego de ser expuestas a palabras y música tanto armoniosas como agresivas y comprobó, también, que el agua forma distintas estructuras. Esto significa que el agua es una partícula inteligente, que tiene conciencia y que se comunica.
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